lunes, 18 de agosto de 2014

EL MEJOR NEGOCIO ES EL MÁS TONTO

Hace poco leí una explicación bastante larga de un conocido gurú de negocios donde le daba varias vueltas a la idea sobre cómo pueden los empresarios acortar la brecha entre la antigua manera de hacer negocios y la de ahora; se trata de convertirse en verdaderos líderes dedicados a que sus seguidores crezcan dentro de las corporaciones ( ni siquiera tengo claro si todavía está permitido hablar de corporaciones). 
Lo que si tengo claro es que al empresario lo borraron del mapa y lo sustituye el líder cuyas intenciones son más altruistas y que se asemeja más a un profeta arreando a sus rebaño de fieles que al Ciudadano Cane que nos vendió Orson Wells en su momento. 


De más está decir que quienes optaron por montar una empresa y están a caballo entre la era industrial y la era de la información van a pasar mucho trabajo para aceptar y adaptar las nuevas prácticas de negocio, o tendrán que entregarle el mando a otro que esté decidido a crear riqueza en vez de contar los centavos. 

Pero ahora viene lo más peludo. Los gurú le piden a las empresas y a sus líderes que se vayan por lo más simple. Lo más deseable sería que la inspiración llegara desde la frase de Leonardo Da Vinci: "La simplicidad es la máxima sofisticación". Pero no, aunque la idea no es nueva, viene del ingeniero Kelly Johnsonn que trabajó en el diseño de aviones espías para la Loockhead, siguió rodando y en el mundo del diseño se dieron banquete produciendo logos que van desde la frase incial:"Keep it simple, stupid", pasando por "Keep it short and simple" hasta ""keep it simple and straightforward". Y todo se resumió con la palabra KISS. 

Lo cierto es que las cosas se han complicado hasta el punto que los gurú piden a los líderes de los negocios que no se ocupen de la estructura sino de la filosofía, de las ideas, lo cual no quiere decir la Visión. Los empresarios tienen que aprender a desarrollar su liderazgo, tienen que apoyar a sus seguidores dentro de la organización para que crezcan y tienen que estar al servicio de sus empleado con el mismo entusiasmo y devoción como lo haría una monjita de la orden de la Madre Teresa de Calcuta.

Al final, esa búsqueda de simplificar y de hablar de ideas y no de números lleva a un enunciado fundamental que parece sacado de un manual Zen: "El mejor negocio es el más tonto". 

Pero...

Claro que la publicidad está al acecho de todo lo que está pasando y los más aguerridos MadMen crean una campaña para el cigarrillo Camel. 
Si, las tabacaleras después de años de desconcierto sin identificar bien su target surgen con una campaña para revistas para jóvenes que lleva una IDEA universal, actual, sugerente e imbatible: TASTE IT ALL.   
A PROBARLO TODO porque es nuestro derecho, es la libertad.
Adiós a los machos fumadores:


 y bienvenido el mundo de las ideas: 



"Inspiración es cuando un momento se convierte en memoria".  Comience a contar su historia!

Los anuncios han invadido las revistas para gente joven en Canadá. Los profesores de marketing interpretan la campaña como una incitación a que los jóvenes vivan el momento sin medir las consecuencias. 







"Descubre lo inesperado, celebra lo inolvidable".  Que viva el cambio con lamparitas chinas!






En Estados Unidos están alerta porque sus jóvenes leen revistas canadienses. Una vez más la publicidad interpreta limpiamente.